Hay un niño que mientras toma su mate cocido observa de refilón a una mujer. Una mujer retacona, de cara redonda y pantorrillas poderosas. Esa mujer va y viene frenéticamente por la pequeña cocina. Entra, sale, sube baja... y otra vez... sube, baja, sale entra... Mientras lo hace tararea un tango... con el tiempo este niño sabrá que cantaba uno de Julio Sosa... En un momento de ese tango quiebra su garganta para entonar su parte preferida... "... y mañana cuando seas descolado mueble viejo, y no tengas esperaaaanzas en el pobre corazon..." El niño que la mira vuelve su vista a su taza y sigue con su desayuno... Tiempo despues ese mismo niño, ahora puesto en un envase de hombre está de nuevo enfrente de esa mujer, ahora puesta en un envase de anciana... hablan de cosas varias... de las hijas del niño/hombre, del clima, de lo cara que está la vida... Mientras hablan, el niño/hombre le da en la boca una taza de sopa. Ella la toma como una nena/mujer/anciana obediente. La t...